Biografia De Tito Gomez

19/04/1948 Juana Diaz, Puerto Rico

12/06/2007 Cali, Colombia

En Colombia le decían el Camaleón de la Salsa porque se adaptaba con facilidad al estilo de cualquier orquesta. También lo conocían como el Sonero Errante porque le encantaba recorrer el mundo con su música.

Humberto Luis “Tito” Gómez, el cantante juanadino de 59 años, falleció de madrugada en la clínica de la Fundación Valle del Lili, a donde fue trasladado tras sufrir un ataque cardiaco en su casa de Cali.

Su deceso cubre de luto la música popular puertorriqueña y al género de la salsa internacional porque, a pesar de sus problemas personales, su legado artístico de casi cinco décadas perdurará por siempre como referencia obligada para las nuevas generaciones de soneros latinoamericanos.

A mediados de la década del 60, Tito saltó a la fama al grabar con La Sonora Ponceña de Quique y Papo Lucca el son montuno ‘Hacheros pa’ un palo’. Y rápidamente, junto al santaisabelino Luigi Texidor consolidó el frente más exitoso, popular y carismático en la historia de medio siglo de La Ponceña. Sus dúos con Luigi en los boleros ‘Nobleza’ y ‘Nosotros’ son clásicos.

“A mí me lo recomendó Chago Hernández, que era líder del Cuarteto Yumurí. Recuerdo que lo fui a buscar a su casa en Juana Díaz. Lo encontré y lo invité a ensayar”, recordó ayer don Quique Lucca, de 94 años.

Inmediatamente, Gómez impuso su versatilidad como intérprete, ya que no sólo dominaba el guaguancó, sino que era un brillante bolerista y merenguero, como lo demostró en melodías como ‘Paño de lágrimas’, ‘Imploración’, ‘Nació cansao’ y otras.

“Donde quiera que lo pusiera, Tito era bueno”, afirmó el fundador de la Sonora Ponceña.

Tito, cuyas versiones de ‘Prende el fogón’ y ‘Tumba la caña jibarito’ son considerados estándares de la salsa, abandonó la Sonora en 1972 cuando el trompetista Joe Rodríguez, por diferencias con la dirección de la agrupación, organizó La Terrífica junto al compositor Francisco “Chalina” Alvarado.

Con esta banda ponceña, Gómez popularizó el son montuno ‘Hachero mayor’, pero su estadía no fue muy prolongada. En 1974 se trasladó a Nueva York, donde fue reclutado por Ray Barretto para integrar, junto al panameño Rubén Blades, el nuevo frente de su orquesta tras la salida de Tito Allen.

De su disco con Barretto, los cortes ‘Guararé’, ‘Vine pa’ echar candela’ y ‘Testigo fui’, éste de Tite Curet Alonso, escalaron las listas de América.

En una de las apariciones multitudinarias más aclamadas de su carrera, en 1976 Tito se reencontró con Ray Barretto en el Beacon Theater de la Ciudad de los Rascacielos, donde el Rey de las Manos Duras se despedía temporeramente de la salsa con un magno concierto escenificado junto a Tito Puente, Orestes Vilató, Adalberto Santiago, Tito Allen y Rubén Blades.

De su primer disco como solista, titulado “Para Gozar Borinquen” (1977), pegó fuertemente el sencillo ‘Veneno’ y el son ‘Estás caliente’, original de Rubén Blades.

De regreso a Puerto Rico se asoció nuevamente a la Sonora Ponceña, sustituyendo en 1978 a Luigi Texidor en el elepé “Explorando” (1978). Ese año, las versiones de ‘Nací moreno’, grabada también por Luigi con Bobby Valentín, se disputaron la primacía en las listas de popularidad.

Cerrado su segundo capítulo con La Ponceña se asoció al pianista Tito Valentín y su banda Ají Bravo. El disco “Tierra, Música Y Sentimiento”  (1979) es considerado una joya de la salsa experimental, fusionada con la danza puertorriqueña, el aguinaldo y el jazz.

Durante varios años colaboró con Ruby Hadock, Charlie Palmieri y otras orquestas. Pero, cantante errante al fin, se embarcó para Venezuela y grabó con la Orquesta La Amistad. De regreso a Nueva York, el productor colombiano Jairo Varela, director del Grupo Niche, lo contrató como vocalista principal de su agrupación.

Hoy Cali toca su música y lamenta su muerte.

“Tito era casi como un hijo adoptivo de Cali. Después de Héctor Lavoe fue el cantante boricua que más tiempo estuvo allí. Cuando se rompió Niche fue el que mantuvo la salsa en Colombia y mantuvo vivo a Niche. Al hablar de la historia de la salsa en Colombia se debe pensar en antes y después de Tito Gómez”, destacó el disc jockey colombiano Gary Domínguez.

A su salida de Niche, Tito Gómez emprendió una segunda etapa como solista al ser firmado por Musical Productions, sello que durante la década del 90 y a comienzos del 2000 editó sus discos “Un Nuevo Horizonte” (1991) , “Agradecimiento” (1993), “Recogiendo Frutos” (1995), “Volver” (1997), “Quién Nos Iba A Decir” (2000), “Las Páginas De Mi Vida” (2001) y “Comenzando En Cero” (2004), el que realizó al salir de una prisión federal tras cumplir una condena por intentar introducir sustancias controladas en Estados Unidos.

 Liberado, en febrero de 2004 regresó a Puerto Rico para cantar en el concierto del 50 aniversario de la Sonora Ponceña y dos meses después en el espectáculo “Toda una vida” de Ray Barretto.

Tito Gómez, quien era ciudadano americano, obtuvo la residencia colombiana tras unirse en matrimonio varios años atrás a la joven caleña Sandra Amparo Lastrilla.

Gracias Sonero Errante

Fuente: Herencia Latina